Aunque nuestro blog — lógicamente — se centra en los FAP y los catalizadores, hoy toca centrarse en la válvula EGR. Forma parte del sistema de control de la contaminación de su vehículo y se encuentra principalmente en los vehículos con motores diesel. Obligada por la normativa europea sobre emisiones contaminantes, despierta regularmente la ira y el descontento de los automovilistas que dudan de su eficacia real. Si quiere entender por qué una simple válvula levanta tanta pasión, aquí tiene nuestro artículo sobre la válvula EGR. Entre el funcionamiento, el rendimiento y el mantenimiento, se lo contamos todo.
La válvula EGR (Exhaust Gas Recirculation) es una pieza mecánica que recicla parte de los gases de escape. Situado entre el colector de admisión y el colector de escape, su objetivo es reducir las emisiones de óxido de nitrógeno, que son especialmente perjudiciales para la salud y el medio ambiente.
Una clapeta y un diafragma componen este conjunto. Una parte de los gases de escape quemados pasa por la válvula EGR y se reintroduce en la admisión. La otra parte de los gases sigue su camino por el conducto de escape, se somete al tratamiento del FAP o del catalizador y finalmente escapa por el silenciador.
La válvula se abre o se cierra de forma intermitente, en función de los parámetros proporcionados por la electroválvula. Así, la válvula EGR recicla entre el 5 y el 35% de los gases de escape mediante su recombustión. Así, teóricamente, están menos cargados de CO2 cuando se mezclan con el aire que respiramos.
Con estas pequeñas explicaciones establecidas, luego entenderá fácilmente lo que siempre acaba ocurriendo. Dado que la válvula EGR es un sistema dentro del cual fluyen los gases contaminantes, eventualmente se obstruye. Las partículas finas y el carbón se acumulan en la pieza, se acumulan y acaban obstruyendo la válvula.
Si la válvula permanece en la posición abierta, redirigirá continuamente parte de los gases de escape. El sistema de inyección de combustible de su coche sufrirá gravemente y a su vez se obstruirá. Por el contrario, si la válvula permanece cerrada, no se produce ninguna redirección. Su sedán o SUV entonces contaminará el aire ambiente más de lo que debería.
¿Cómo entonces mantener eficazmente una válvula EGR? De la misma manera que con un FAP o un catalizador. Los trayectos cortos por la ciudad a bajas revoluciones son un dolor de cabeza para nuestros vehículos, que sólo esperan dar rienda suelta a sus caballos en grandes tramos de asfalto. Así que planee viajes bastante regulares en la autopista para que el motor alcance la temperatura.
¿Qué hay de la limpieza? En efecto, existen productos para limpiar la válvula EGR, que se vierten en el depósito de combustible. Si la pieza está demasiado sucia, será necesario desmontarla y limpiarla en profundidad. Si, a pesar de todos sus esfuerzos, el resultado no es satisfactorio, lo más probable es que tenga que pasar por el proceso de reparación y sustitución. A continuación, deberá gastar entre 250 y 650 € en su taller, incluidas las piezas y la mano de obra.
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Acabamos de explicarlo, el mayor inconveniente de la válvula EGR es que se obstruye muy rápidamente. Los conductores de vehículos diesel no van a discutir con nosotros en este punto.
Cuando se dice falta, se dice falta. Detectará un mal funcionamiento de la válvula EGR con bastante facilidad. El vehículo pierde repentinamente la potencia, hasta el punto de que no se revoluciona en absoluto. Dejaremos que se imagine lo peligroso que es esto si esta bajada repentina de revoluciones se produce cuando está adelantando a otro vehículo a toda velocidad.
Entre los otros síntomas, también encontramos que el coche roza y se cala muy a menudo, así como la emisión de un espeso humo negro, lejos de hacerse simpatizar con los demás usuarios del espacio público.
En caso de avería, una luz de aviso aparecerá en el salpicadero de su vehículo. Dependiendo de la marca de su coche, verá aparecer la luz del motor o la luz de advertencia del escape. A continuación, el manual de instrucciones del vehículo le proporcionará todos los detalles que pueda necesitar.
Independientemente de si se monta en un Clio 2, un Peugeot 307 o incluso un Opel Zafira, la válvula EGR funciona de la misma manera. La tentación suele ser desconectarla, condenarla o desmontarla, simple y llanamente. No importa cómo se llame esta operación, sigue estando estrictamente prohibida por la ley.
Algunos avispados no lo quitan, sino que lo tapan cerrando la válvula, para que los gases ya no pasen por ella y salgan directamente por el sistema de escape. Esto es indetectable, incluso en la inspección técnica. Sin embargo, recordemos a estos listillos que se arriesgan a recibir hasta 7500 € de multa, lo que da que pensar.
Sin embargo, tenga en cuenta que esta anulación no siempre es posible. Dependiendo del modelo, el coche fallará y mostrará un código de error.
La anunciada vuelta de tuerca en 2019 sobre la reforma del control técnico tiene más el efecto de anuncio que de amenaza real. No obstante, tenga cuidado y en Krosfou consideramos que un automovilista informado vale por dos.